Es normal querer temperar la casa para no sufrir de los embates del invierno. Estufas a gas, scaldasonno e incluso estufa a leña es habitual en nuestra rutina invernal, pero ¿cómo le afecta esto a nuestros peludos queridos?
En el caso de los perros, depende del tipo de pelo y de si son razas ‘de invierno’, que en realidad sean menos frágiles o razas pequeñas, que por lo general sufren más de faringitis, constipación o problemas respiratorios por pasar de la casa que está calentita a la calle fría cada vez que salen de paseo.
Es un hecho; Está comprobado que el aumento de temperatura por la calefacción dentro de casa provoca cambios como la muda de pelaje. La calefacción hace que haya animales que mudan el pelo todo el año, sobre todo los de pelo corto.
Ahora, ¿cómo controlar la temperatura y darse cuenta que efectivamente tiene frío?
Igual que los humanos. Tirita o se acurruca, esto se puede ver a simple vista. Sin embargo están más capacitados para soportar las inclemencias del tiempo, ya que su pelo les protege, aunque siempre va en función de la raza. No es lo mismo un perro grande y peludo, que tiene mucho pelo, a un chihuahua, que casi no tiene.
Sabemos que los animales sufren los cambios de temperatura tanto como los humanos. Pero en el caso de los perros hay que seguir una serie de cuidados, sobre todo relacionados con su pelaje.